Mi mayor no sé
No sé si es tu sonrisa o el atardecer
No sé si tengo tiempo para la valentía
O si sueño con un beso que vino y se fue
No sé si era el vino o mi torpeza
No sé si eran las sábanas o tu piel
No sé si era que mi sentido estaba en tu vida
O si dormía con la soledad, engañándome
Quizás era el reflejo de tus ojos
O hasta tu devoción por los romances del ayer
Pero cuando se cruzaron tu música y la mía
Hubo tan dulce melodía
Que una nube negra llamó a mi puerta y no la escuché
O hasta tu devoción por los romances del ayer
Pero cuando se cruzaron tu música y la mía
Hubo tan dulce melodía
Que una nube negra llamó a mi puerta y no la escuché
No sé si hubo otras canciones
No sé hace cuánto las olvidé
No sé si fui feliz en el pasado
O si tu parecido a la alegría lo inventé
No sé hace cuánto las olvidé
No sé si fui feliz en el pasado
O si tu parecido a la alegría lo inventé
No sé de recuerdos, memorias ni ilusiones
No sé qué es el futuro cuando mi cabeza está al revés
No sé si hay misiones, destinos o dioses
O si ya no existe el camino que atrás dejé
No sé qué es el futuro cuando mi cabeza está al revés
No sé si hay misiones, destinos o dioses
O si ya no existe el camino que atrás dejé
Solo sé que te extraño todo el día
Y que te sonrío una y otra vez
Porque siento un abrazo cada tanto
Que me recuerda en mis noches de llanto
De una vida y un poema que jamás te dediqué
No sé para qué sirven mis lágrimas
No sé si me alcanza esta embriaguez
No sé si deshacerme de tus versos
O si el único consuelo existe en la tinta y el papel
No sé por qué te fuiste tan temprano
No sé por qué no te dejaron volver
No sé si hoy es un nuevo día de pena
O si es uno menos para volverte a ver
Tu muerte me llenó de dudas
Pero hay una que es mi mayor “no sé”
Le pregunto al Sol, al viento y a las golondrinas
¿Seguís viva por mis rimas?
¿O te sepulto con este poema, despidiéndote?
Y que te sonrío una y otra vez
Porque siento un abrazo cada tanto
Que me recuerda en mis noches de llanto
De una vida y un poema que jamás te dediqué
No sé para qué sirven mis lágrimas
No sé si me alcanza esta embriaguez
No sé si deshacerme de tus versos
O si el único consuelo existe en la tinta y el papel
No sé por qué te fuiste tan temprano
No sé por qué no te dejaron volver
No sé si hoy es un nuevo día de pena
O si es uno menos para volverte a ver
Tu muerte me llenó de dudas
Pero hay una que es mi mayor “no sé”
Le pregunto al Sol, al viento y a las golondrinas
¿Seguís viva por mis rimas?
¿O te sepulto con este poema, despidiéndote?
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